domingo, 30 de enero de 2011

La Trilogía de Nueva York

La Trilogía de Nueva York de Paul Auster cuenta con tres relatos: La ciudad de cristal, Fantasmas y Habitación Cerrada.

El primer relato (Ciudad de cristal), comienza con una llamada de teléfono al escritor de novelas de misterio Quinn de alguien que pregunta por el detect

ive Paul Auster. Sin saber por qué, este personaje se hace pasar por el investigador y se hace cargo del caso. Termina con Quinn contándolo todo en un cuaderno rojo cuando ya su vida estaba totalmente cambiada y hasta arruinada.

El segundo relato (Fantasmas) comienza casi igual que el primero:

alguien anónimo encarga un caso a un detective cuya identidad no es revelada. Y el caso consiste en seguir los pasos de un tercer hombre, también anónimo, cuya única actividad parece ser escribir un manuscrito frente a una ventana. Ninguno tiene nombre, sólo "color". Uno es Azul, otro Negro y otro es Blanco. Y acaba con el descubrimiento, o la reveladora sospecha, de que el hombre espiado ha recibido, a su vez, el mismo encargo que él, espiar al detective que le espía.

El tercer relato (La habitación cerrada) empieza con dos viejos amigos escritores, uno de los cuales ha desaparecido dejando atrás mujer e hijo. Un detective lo ha buscado inútilmente. Y el amigo protagonista recibe el encargo de ocuparse de la posible publicación de los manuscritos de su viejo amigo, y también de su mujer y de su hijo. De la vida que el desaparecido ha dejado atrás.

Y acaba con el reencuentro de los dos amigos, en una casa abandonada, donde el desaparecido le entrega al otro su último manuscrito en un cuaderno rojo,

Como lo hacía Quinn. y si no es el mismo, podría serlo.

Opino y Te Cuento: No soy critica literaria, pero leo mucho.

Esta trilogía publicada en tres partes entre 1985 y 1987, lanza al autor como escritor internacional. Los relatos son entretenidos, dejan varias partes a la imaginación del lector, invita a participar y a ser parte y sumergirte en los enredos de las historia. Son tres textos separados, pero que podría tener alguna conexión. O sea, puede leerse uno sin ver los otros dos textos y se entiende perfectamente. Aunque cada uno tiene algún contacto con los otros.

El autor presenta los textos de manera dinámica, atrapante, invita a seguir leyendo. Como todos los libros publicados por Auster, en mi opinión, hace difícil sentir aburrimiento cuando pasas las hojas. incluso hace que no dejes de leer. Es un libro que tardé menos de una semana en terminarlo, cuando en realidad tenia que estudiar. o sea, es rápido, ágil, entretenido.

Pero como dije antes, no soy critica literaria, así que invito a que lean estos tres relatos y creo que no se van a arrepentir.

"El último caso de Rodolfo Walsh"

En 1976 Rodolfo Walsh publica su célebre carta “A mis amigos” donde explica

la muerte de su hija, Victoria, en un enfrentamiento con las Fuerzas Armadas. A partir de ese texto Elsa Drucaroff imagina una trama de acción, espionaje y suspenso, recreando sin tabúes la resistencia guerrillera al comienzo de la más sangrie

nta dictadura militar argentina. Esta novela histórica es de ritmo vertiginoso donde Walsh es un detective, como en sus mejores relatos policiales. Con personajes complejos de uno y otro bando, donde se mechan sus amores y su pasión política, y una sucesión de intrigas y conspiraciones, El último caso de Rodolfo Walsh es una ficción audaz que discute la historia reciente argentina, más allá de los lugares comunes.

En mi opinión es una novela que por momento, mezcla demasiados momentos y a veces se pierde el hilo de la narración. Por su afán de hacerlo ágil, termina haciendo que el lector tenga que volver a ciertas partes. Igualmente, como bueno tiene el hecho de que cuenta los dos bandos, muestra las dos partes de la historia y mecha la ficción con sucesos históricos reconocidos.

Les dejo otro cuento, breve, publicado por la autora

http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=979435

viernes, 21 de enero de 2011

Ante la Ley, Somos todos iguales

Según nuestra Constitución Nacional, toda persona que posean cualquier tipo de
discapacidad, tienen el derecho de una cobertura del 100% para todos
sus tratamientos, por parte del Estado, Obras Sociales o prepagas . Aunque existan leyes que otorguen estas prestaciones, muchas personas no lo poseen y además existe un total
desconocimiento por parte de la sociedad en relación a este tema.
El Estado, las Obras Sociales y las empresas de medicina prepaga, están obligadas a cubrir el ciento por ciento y sin límite de tiempo del
tratamiento de enfermedades crónicas, o de aquellas situaciones que llevan a los afiliados de las prepagas u obras sociales a padecer una desventaja o discapacidad respecto del resto de sus semejantes.

Hay dos leyes, en el marco normativo de nuestro país, que otorgan estas prestaciones para los pacientes. Una de ellas es la
23.661 la cual determina que todo aquel que padezca una discapacidad, tiene una cobertura del 100% para los gastos de sus
medicamentos. Por otro lado, la ley 24.901 que otorga beneficios tales como terapia y rehabilitación para discapacidades motoras, transporte público y educación ya sea para estimulación temprana o para la educación laboral. Además incluye la internación domiciliaria sin ningún costo para el paciente y ayuda al grupo familiar.
La Doctora Crsitina Arrechea, encargada del área de discapacidad del
Hospital Italiano explica que “toda persona discapacitada tiene derecho a que se cubra el 100 porciento los medicamentos propios de la discapacidad para subsanar las diferencias con los demás”. Con esto, informa que los remedios ajenos a esto, como pudiera ser un resfrío,
no son cubiertos totalmente por la prepaga. Además, continua, “en cuanto a los lugares de rehabilitación, los que son cubiertos son los impuestos por la prepaga ya que cada centro posee un servicio de rehabilitación y un lugar propio para llevar a cabo el tratamiento”

Se entiende por tratamiento, no solo los costos de los medicamentos, sino también el uso de cualquier medio asistencial, atención médica y cualquier tipo de
instrumento necesario para el desenvolvimiento rutinario de la persona. Además se incluyen las internaciones geriátricas, rehabilitaciones y todo tratamiento destinado a que el paciente tenga una mejor calidad de vida. La ley otorga estas prestaciones a toda persona que posee el certificado de discapacidad y siempre atendiendo a lo que la prepaga dispone.

Arreche afirma que también es necesario la cobertura psicológica de las personas con dificultades y además, también, cubre el tratamiento
psicológico de los miembros de la familia que lo solicite. En cuanto a la escolaridad, prevista por la ley que debe ser cubierto por la prestación, debe saberse que este beneficio se otorga siempre y cuando “no hay oferta pública de escuelas”. La misma situación se prevé en los transportes públicos, que son cubiertas solo cuando el paciente no puede, de ninguna manera, por sus dificultades, usar los transportes públicos para continuar con su tratamiento.
A pesar de que las leyes existan, muchas personas en estas condiciones de vida aun no lo saben y, en algunos casos, las prestaciones se niegan a cumplirlo o no informan a los pacientes sobre la existencia de estas facilidades que llevan a un mejoramiento del nivel de vida. Vanesa Vieras Dos Santos, abogada especialista en Derecho del Consumidor, afirma que todo aquel que esté en estas condiciones y posea el certificado de discapacidad y aun asi, la Obra Social o prepaga se niegue a brindar la cobertura el beneficiario podrá interponer administrativamente una denuncia ante Defensa del Consumidor por incumplimiento en de contrato y judicialmente iniciar
una acción de amparo a fin de que se le brinde en forma urgente las prestaciones requeridas, solicitando daños y perjuicios. Además, explica que una vez agotada la vía interna en el país, podrá realizarse una denuncia ante La Corte Interamericana de Derechos Humanos.

La denuncia ante Defensa del Consumidor es totalmente gratuita y según la Doctora Viera Dos Santos, “tiene como beneficio directo la inmediatez con las que las autoridades le dan tratamiento al caso y hasta pueden dictar medidas cautelares o preventivas con el fin de que se evite el cese del servicio agravándose la situación del discapacitado. Además por el art. 40 bis el denunciante puede solicitar la fijación de un daño directo que puede llegar a aproximadamente a 7.000 pesos que será deducible de la indemnización que se fije en sede judicial.”
Toda persona con cualquier discapacidad, tiene derecho a una cobertura total de su tratamiento, siendo un derecho otorgado por la Constitución Nacional Argentina y los organismos encargados de otorgar este beneficio deben tener en cuenta las dificultades que padecen los pacientes en esta situación.

jueves, 20 de enero de 2011

Globalización y Juventud

La globalización considerado como proceso de comunicación e interdependencia entre los países del mundo que unifica los mercados y sociedades, es hoy un fenómeno que afecto profundamente la cultura,
y sobre todo, la de los jóvenes quienes muestran un notable cambio en su visión y en su manera de percibir el mundo.

Según Manuel Catells, “es un proceso de articulación de las actividades estructurantes de todas las sociedades en redes planetarias que tiene capacidad tecnológica, organizativa, institucional de funcionar
como una unidad en tiempo real”. Sea cual sea la definición que tomemos, la globalización implica una unión y una relación a escala global, no pensada antes de la década del 80.
En cuanto a los jóvenes, se puede afirmar, que a pesar de las diferencias económicas o políticas, todos son hijos de una misma civilización: la de los medios de comunicación y consumo. Quienes nacieron en las últimas décadas, vieron como la tecnología se apodero de la rutina. Éstos que, por su contacto y familiaridad con esta herramienta, absorbieron la cultura globalizada con más facilidad y se adaptaron a ella.

La socióloga de la Universidad de Buenos Aires, Carmen Pachecoy,
percibe que la globalización alteró la visión de los menores “La juventud lleva a cabo un proceso de cambios de valores, de pensamientos y esto se generó producto de la mezcla de las culturas donde ya no existe una para cada región, sino que todos somos productos de una general que interfiere en todos los pensamientos”

En estas sociedades podemos observar que los más chicos, han adoptado diversas formas de comportamiento y estilo que han sido influenciados por este fenómeno global: “en nuestros días, los padres no tienen gran peso en la conducta de los jóvenes. La escuela no es el único eje de adquisición de conocimiento. Este cambio se produjo cuando los medios masivos se interpusieron en la rutina diaria” afirma el psicólogo e investigador, Sergio Balardini. Debido a su cercanía con los desarrollos tecnológicos se ha permitido que la globalización y sus consecuentes cambios lleguen al mundo, antes que llegue la referencia familiar o escolar, derivando en una pluralidad de culturas. “La familia y la escuela pierden su credibilidad e interés y así, la TV e internet se convierte en el orientador de la moda, los valores y los estilos de vida”, continua Balardini

Una de las consecuencias que introdujo en la vida de los jóvenes fue convertirlos en un sujeto para el consumo. Según Jesús Martin Barbero en su obra Para pensar en la comunicación en Latinoamerica “La globalización de la economía hace que las personas sean actores clave de para la compra de ropa, música, tecnología, espectáculos y esto se llevo a cabo por una gigantesca estrategia publicitaria.”Para Balardini, esta cultura globalizada y consumista se introdujo en la vida generando que “las fronteras entre diferentes regiones culturales sean difusas; ahora, personas distantes geográficamente, pueden escuchar la misma música, vestirse con el mismo tipo de ropa y poseer un pensamiento similar. Estas diferencias culturales que se veían anteriormente y que marcaba las diferencias entre zonas, hoy ya no existe”. El escritor Barbero califica esta situación como “identidades colectivas internacionalizadas”.

La tecnología abarco todos los espacios de la vida diaria y todo el mundo se encuentra conectado mediante diferentes mecanismos o redes sociales. Además, Barbero en la misma obra, sostiene que: “la televisión o la computadora convirtió el hogar el espacio domestico en un espacio virtual. Es ahí donde el joven se apropia de otras culturas y estilos de vida, ya que, ahora, estar en casa no significa más estar apartado”

Según la perspectiva histórica de la globalización, hay quienes consideran esto como una novedad, algo totalmente diferente a las que vivimos en el pasado; surge después de la transformación generada por la Caída del Muro de Berlín y aun se está desarrollando. Es así, que hay generaciones que crecieron con esta idea y hay quienes se tuvieron que adaptar, más que a un nuevo concepto, a una nueva fo
rma de vivir.

Garcia Canclini en su obra Culturas hibridas, afirma que el “fenómeno social, juventud, globalización y cambio cultural va unido a un proceso largo pero imperceptible a simple vista, determinado por un proceso de hibridación de culturas, que se verifica en la vida cotidiana de los jóvenes sea cual sea su espacio sociocultural”.

Carmen Pachecoy concluye que, “hoy más que ayer, los jóvenes antes de pensar en sus derechos como ciudadanos se dedican a pensar en sus derechos como consumidores: van de shopping, “navegan” por Internet, utilizan sus Ipod, sus mp3, sus teléfonos celulares”.

Pachecoy sostiene que “aunque no sea en todos los casos, cada vez menos se ve que los jóvenes se preocupen por sus igualdades; consideran más sus necesidades materiales más que morales”

Trabajo final Periodismo Internacional --> Rocío Roma

miércoles, 19 de enero de 2011

Es la ley de la vida

FOTO: Rocío Roma

Extraño mi jardín de infantes

Extraño mi escuela secundaria

Extraño mi casa de muñecas

Mi auto de las barbies

Extraño mis tardes de mates, con Alejandro Sanz en el CD, y con mi amiga

Extraño a mi hermana incondicional, la que una vez agarro sus valijas llena de recuerdos y se fue

Extraño a mi abuelo

Extraño tener responsabilidades mínimas

No tener problemas, y solo pensar en el chico de turno que me gustaba

Extraño mi seguridad

Extraño mi yo soñadora

Extraño lo que dejé ayer

Y, aunque hoy soy feliz, todos extrañamos a lo que dejamos ir.

Es la ley de la vida

Las agujas avanzan sobre el reloj

Lo esencial es invisible a los ojos

FOTO: Rocío Roma
TITULO: "El Principito"

No se en Qué Momento nos dejó de salir lo que antes nos salía tan Fácil


FOTO: Rocío Roma

Eterna Soñadora



Hoy me acordé de ese libro que leí cuando era más chica (si MÁS chica, porque soy una niña aún). Es esos libros bobos que los lees en un día y que los agarras una y otra vez para volverlo a leer. Ya sabes el final, que pasa en cada momento y te diría que sabes hasta dónde está la coma. Pero lo lees. Ese libro, en mi caso, se llama “Cartas para Julia” y es la historia de una nena que se va de vacaciones separada de su amiga(esa amiga inseparable) donde generalmente la pasa mal con su familia. Pero todo cambia cuando conoce a su gran amor en esas terribles vacaciones familiares. Entonces todos los días le escribe cartas a su amiga para contarle, paso por paso, lo que sucede con el “susodicho” y recibe las respuestas de su amiga, con consejos y anecdotas. Obvio que como todos, termine que el nene le da su primer beso minutos antes de abandonar las vacaciones…

Creo que todas, en algún momento, soñamos con tener una historia asi de genial y con muchas cosas para contar, todas soñamos con un amor de verano, con una amiga eterna e incondicional, con tener un millón de cartas que cuenten, día tras día, nuestras historias. Todos soñamos con revivir aquel momento importante y todos soñamos con poder seguir soñando.

Y HOY CREO QUE:

- Tuve a mi amiga incondicional. Ella que siempre estuvo en cada minuto y que cada recuerdo que tengo de mi infancia y adolescencia lo pienso con ella.

- Tuve mi amor de verano y mi historia genial, con grandes cosas para contar

- Tuve mil cartas que cuentan, casi todos los días, algo de mi vida

- Tengo mis cuadernos donde grabo cada recuerdo importante

- TENGO sueños y TENGO las ganas de seguir soñando.